viernes, 21 de mayo de 2010


Cuando voy por las calles
-sube y baja-
de esta Montevideo, madre cruel,
cuando voy por sus calles,
algo me dice que estoy muerto.

Y muerto estoy.
¿Por qué, si no, se rompen los espejos
cuando me miran,
cuando yo los miro?

4 comentarios:

amelie dijo...

El otro día encontré en Guadalupe (un lindo pueblo de Extremadura) una golondrina en un alero, síntoma inequívoco de la primavera. Ahora esta hoja en el suelo apunta que allá se viene el duro otoño...

Sea como sea, me encantó la foto. "Calma, todo está en calma..."

Beso grande

Un tal Iván dijo...

"Golondrinas de un solo verano
con ansias constantes de cielos lejanos.
Alma criolla, errante y viajera,
querer detenerla es una quimera...
Golondrinas con fiebre en las alas
peregrinas borrachas de emoción...
Siempre sueña con otros caminos
la brújula loca de tu corazón..."

Alfredo Le Pera escribió este tango que musicalizó y canta maravillosamente Gardel, si no fuera porque lo creó en 1934, diría que lo hizo pensando en vos. Es una bella forma de definirte.
Aquí estamos viviendo un hermoso otoño, es una estación que me gusta mucho, le sienta muy bien al sentir falquiano.

Laura dijo...

Iván, qué linda foto... Captura perfectamente el aire invernal de la ciudad por estas fechas...

NuMaN dijo...

Iván,acabo de encontrar tu blog hace instantes y ha sido muy emocionante,gracias por crear este espacio en honor del Maestro!
Espero que no hayas abandonado este blog definitivamente,es un rincón especial de la blogósfera!
Un abrazo!